Debemos educar las emociones en niños y niñas en cuarentena

Debemos educar las emociones en niños y niñas en cuarentena

02 Julio 2020

Como sociedad debemos generar un cambio: entender y saber que expresar lo que sentimos es algo positivo y no negativo, que eso no nos hace más débiles o inestables, todo lo contrario. 

Katherine Sáez >
authenticated user Corresponsal Corresponsal Invitado

El carácter es algo que heredamos de nuestros antepasados, pero la personalidad es algo que vamos formando durante la vida, según nuestras vivencias y conocimientos vamos moldeando nuestra forma de ser.

Nos hemos enfocado tanto en pensar qué pasara con el futuro profesional de los niños y niñas, sobre sus calificaciones y curriculum, que hemos olvidado enseñarles herramientas para poder identificar y calmar sus emociones. 

Cuando un niño o niña es capaz de reconocer y conocer las emociones en si mismo y en los demás, le ayudará a entender qué siente y porqué se encuentra en ese estado. Esto, no solo trae beneficios en este ámbito, sino que además beneficia a la formación de un adecuado desarrollo del autoestima y a su vez, un sano autoconcepto.

Los niños y niñas se encuentran viviendo por primera vez una experiencia única, que les ha cambiado su modo de vida en forma drástica, dejaron de ir a los establecimientos educacionales, dejaron de salir a jugar, visitar amigos y practicar deportes, dejaron de vincularse con un otro como antes.

Estar aislado de todos provoca un nivel de ansiedad difícil de controlar y es en este contexto, que poder expresar cómo se sienten ayudará a bajar estos niveles y buscar nuevas formas de entretención. Ayudará a tener mejores relaciones con sus padres, hermanos y personas con las que convive diariamente.

La educación emocional, es un tema pendiente en la educación chilena, no solo basta con generar conocimientos en el área instrumental, debemos tener un enfoque de educar personas emocionalmente estables y poder brindar el apoyo a las familias que se encuentran en situaciones de inestabilidad emocional.

Como sociedad debemos generar un cambio: entender y saber que expresar lo que sentimos es algo positivo y no negativo, que eso no nos hace más débiles o inestables, todo lo contrario. Identificar nuestras emociones nos empodera y nos facilita encontrar soluciones a problemas que vivimos en la vida diaria, familiar y laboral y por los que todos hemos pasado.

El rol de los padres y/o cuidadores es fundamental, ya que es el primer vinculo social para un niño o niña, siendo un modelo para ellos y un espacio de seguridad. Es por eso, que no se debe enseñar a reprimir lo que se siente, se debe tranquilizar, contener e invitar a conversar sobre las emociones.

Es relevante mencionar que son los adultos quiénes deben estar pendientes de los cambios de ánimo y reacciones de niños o niñas y ante cualquier duda siempre es mejor consultar con un especialista. A veces es necesario enfrentar como familia miedos, crisis de pánico, ansiedades y/o futuras depresiones.