Los municipios de Coyhaique y Chile Chico son los primeros del país en declarar ilegal la pobreza en Chile. La acción se realizó en el marco del seminario que organizó el Vicariato de Aysén junto a la Fundación Superación de la Pobreza (FSP), con el objetivo de crear conciencia sobre esta iniciativa global. 

En el encuentro participaron como panelistas el presidente ejecutivo internacional de América Solidaria y miembro del directorio de la FSP, Benito Baranda, el obispo de Aysén, Luis Infanti, y el director de la Corporación Servicio Paz y Justicia (Serpaj) Rodrigo Quezada.

En tanto, el alcalde de Chile Chico, Luperciano Muñoz, explicó que “tenemos que hacer acciones concretas, orientadas a que haya una actitud político práctica desde los municipios a comprometerse con que la pobreza sea ilegal desde el concepto político”.

Por su parte, el acalde de Coyhaique, Alejandro Huala, señaló que “debemos cambiar este modelo que nos rige hoy día y que ha abusado de la manera que ha querido con nosotros.  Claramente hoy no vivimos un libre mercado ni hay competencia, lo que hay es colusión y un abuso del poder económico con nosotros”.  Y como muestra de los nuevos objetivos es que Huala se reunió con el alcalde de Recoleta Daniel Jadue, con la idea de operativizar las farmacias municipales en la zona.  La comuna se unirá a las 80 comunas que a nivel país constituirán una agrupación de municipios por las farmacias populares, para la compra y distribución conjunta de medicamentos.

Además, Benito Baranda indicó que “la medida de la pobreza ha estado históricamente en Chile vinculada de forma exclusiva a los ingresos y no a los derechos socioculturales de las personas, que es algo que se entregaba por presión de la ciudadanía y no porque fuera un derecho exigible por parte de los ciudadanos”. También recordó que hubo una modificación en salud que permitió que la ciudadanía comenzara a exigir ciertos derechos y ya existe una medición de la pobreza de carácter multidimensional, lo cual calificó de avances.