23 años de "Fome", el mejor momento de Los Tres

23 años de "Fome", el mejor momento de Los Tres

09 Junio 2020

Fome se alzó como el inicio del fin para la banda, pues es en este período donde la relación de los integrantes (Henríquez, Lindl, Parra y Molina) empezó a deteriorarse, y es en este contexto donde se concibe esta placa compuesta por 15 canciones.

Patricio Gaete >
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Pasar la adolescencia de mi vida en Concepción a mediados de los 90 me marcó de una forma única, principalmente porque el movimiento musical de esta ciudad es uno de los más importantes en Chile.

Además, porque fue una época donde hubo un impresionante auge de bandas nacionales. Una de éstas es Los Tres, que si bien ya contaba con una trayectoria respetable, fue en este período en el que se consolidó como uno de los mejores grupos del país.

Un disco esencial de esta agrupación y que para muchos de los fanáticos significó la maduración de la banda fue el titulado Fome, el cual este mes cumple 23 años de su lanzamiento. Considerado por la revista Rolling Stone dentro de los 50 mejores discos chilenos de todos los tiempos, Fome se alzó como el inicio del fin para la banda, pues es en este período donde la relación de los integrantes (Henríquez, Lindl, Parra y Molina) empezó a deteriorarse, y es en este contexto donde se concibe esta placa compuesta por 15 canciones.

Como toda buena obra musical moderna, comienza con una pieza instrumental llamada “Claus”, la cual advierte que muchas cosas han cambiado y que lo que estás a punto de escuchar es en serio. Con Henríquez en batería, Molina en bajo, Lindl en el órgano y Parra en guitarra, esta composición se comporta como una muy buena introducción para el segundo track y primer sencillo de este disco, “Bolsa de mareo”, a partir del cual se puede apreciar que es una producción grabada, mezclada y masterizada fuera de Chile, específicamente en los estudios Bearsville y Sony Music en Nueva York.

Esta poderosa y eléctrica segunda canción es una que funciona muy bien como primer single, puesto que la banda ya había lanzado 2 discos acústicos (MTV Unplugged y La Yein Fonda). Además, se puede apreciar una batería al más puro estilo de “Tomorrow Never Knows” (The Beatles), la Fender Jaguar de Henríquez y el Lap Steel de Parra en los arreglos.

“Toco fondo”, “Olor a gas” (segundo sencillo) y “De hacerse se va hacer”, tercero, cuarto y quinto track del álbum, muestran el espíritu de Los Tres de siempre, pero con un sonido renovado, tal vez responsabilidad de Joe Blaney, quien fue el encargado de grabar esta placa. Una genial triada llena de significado y con excelentes letras a cargo de Henríquez, quien pasaba por un momento oscuro en su vida.

A su vez, “Antes”, la sexta canción, es la encargada de volver a subir el tempo de este álbum. Cuenta con un espíritu más agresivo, utilizando pedales overdrive (en las guitarras) y dándole un protagonismo nunca antes escuchado a la batería de Molina, quien la aprovecha al máximo con variados redobles y en ocasiones reventando la pobre caja.

En “Fealdad”, Los Tres reiteran (al igual que en “Claus”) que los artistas invitados serán casi nulos y que ellos mismos serán los encargados de tocar todos los instrumentos. De corta duración, precisa y necesaria para darle otra capa más de riqueza al disco, en este deprimente track, con ritmo de vals, Titae pasa del bajo al acordeón y Parra de la guitarra al bajo.

Una de mis favoritas del disco es “Jarabe para la tos” la que tiene un correctísimo inicio con la introducción de Parra, utilizando una guitarra Rickenbacker y una acústica a cargo de Henríquez, para posteriormente sumarse un Molina a contratiempo y Lindl con una excelente línea de bajo.

Esta es la tercera canción del álbum donde Los Tres utilizan la técnica de canon en el canto, técnica que no había sido explotada antes y que le agrega una mayor riqueza al tema (y al disco) e igualmente da la sensación de una obra más pensada y producida que las anteriores.

Abriendo el lado B del disco se encuentra “Libreta”, la canción de rock alternativo o grunge del álbum, la que recuerda un poco a la época de “Se remata el siglo”, (segunda placa del grupo lanzada en año 1993). El track se destaca por la ingeniosa letra de Henríquez aludiendo a estar soltero, el trémolo en la misma guitarra de Álvaro, los arreglos de Parra en su guitarra y una cruda línea de bajo, otro punto alto del disco.

“Me Arrendé”, décima pista del disco, es una íntima, melancólica y hermosa canción donde Henríquez, acompañado solo de su guitarra, habla acerca de la pérdida y la cual se ha transformado en una de las canciones más queridas de los fans de esta banda.

En “Silencio” (cuarto sencillo), muestran un poco de rusticidad, agregando por primera vez a su fórmula, un banjo a cargo de Henríquez, a lo cual se suma el contrabajo de Titae, el tarro de Molina y la acústica de Parra. Con este track terminan de dejar claro que dejaron volar su imaginación respecto a no encasillarse en un estilo o género en particular.

Por su parte, en “La torre de Babel” (tercer sencillo de esta placa), Henríquez nos cuenta una fábula acerca de Gabriel, un pequeño cigarro el cual sufre un desafortunada muerte. Con una cuota de Foxtrot, tal como en sus inicios, esta es una de las canciones más populares y recordadas del disco.

“Pancho”, Treceava pista del álbum, es una especie de balada campesina, que cuenta la triste historia de Pancho y su enamorada Mina. Este es otro de los tracks donde hay un intercambio de instrumentos entre los integrantes de la banda, Titae se hace cargo del acordeón y Molina suple su puesto en el bajo.

La penúltima pista lleva por nombre “Restorán”, siendo la rareza o locura de esta placa, muy pegajosa y al más puro estilo de “Somos tonto no pesados” (del primer disco de la banda) y en la cual solo se describen distintos tipos de comidas.

Finalmente llegamos a “Largo”, que funciona perfecta como culminación de este álbum y donde Los Tres acuden a la misma fórmula que en “Claus”, es decir, de corta duración y con la mayoría de sus integrantes ejecutando instrumentos que no son sus principales.

Resumiendo, Fome es una obra que cuenta con géneros y tópicos para todos los gustos y que de ninguna forma pasa desapercibido para quien lo escucha, especialmente para los fanáticos de la banda.

Alguna vez leí por ahí que esta placa es la obra cumbre de Los Tres, una especie de “Abbey Road”, lo que me hace mucho sentido si es que hablamos de creación, creatividad, calidad, variedad y finalmente quiebre, pues como mencionaba en un principio, es en esta época donde la formación empieza a desmoronarse, crisis que vista desde la perspectiva que nos da el tiempo, tal vez haya sido buena para la banda en términos musicales.

Quién sabe… por mi parte solo tengo la certeza  que Fome es uno de los mejores discos chilenos he tenido la fortuna de escuchar.