Enap Magallanes promueve capacitación de mujeres en esquila ovina

Marcando un hito para la XII Región y dando un impulso diferente a la inserción de las mujeres en rubros altamente masculinizados, ENAP Magallanes lanzó este año un inédito curso de “Técnicas en esquila ovina”, iniciativa a la que postularon un total de 100 personas, 23 de las cuales fueron seleccionadas y actualmente realizan su preparación tanto teórica como práctica.

“ENAP viene desarrollando una serie de capacitaciones hacia la comunidad. Sólo este año vamos a realizar 25 cursos, la mayoría de ellos dirigidos a mujeres. Con esta capacitación estamos abriendo una puerta para que las mujeres se puedan insertar en el mundo de la ganadería y, específicamente, en la esquila”, explicó Alfonso Pacheco, jefe de comunidades y RSE de ENAP Magallanes.

El curso comprende un total de 150 horas y partió en agosto con clases teóricas sobre la fibra de la lana, el buen trato animal, el manejo predial y la historia de Magallanes respecto de la ganadería ovina. Luego vino un trabajo práctico para comenzar a esquilar con cueros y de ahí abordar la esquila propiamente tal, para lo cual se utilizó el galón de Asogama en Punta Arenas. “Yo tengo animales que heredé de mi papá junto a mi familia, y quería saber cómo era esquilar, pero esto es impagable, porque el curso tiene muchas aristas relacionadas con la ganadería, lo que me va a ayudar a sacar adelante mi campo”, reconoció Miriam Aguilar, una de las alumnas.

La actividad ganadera en Magallanes es una de las más importantes de la zona, destacando su producción de lana a nivel mundial. “La lana de Magallanes es la más resistente del mundo y la más blanca. Tiene características muy particulares”, explicó Andrea Cuevas, instructora del curso, quien valoró el empuje de las 23 mujeres participantes. “Ellas están felices. Varias pensaban que no lo iban a poder hacer, porque hay un tema mental y eso las hacía sentirse inseguras; así que emociona ver que pueden hacer lo que se propongan y esto les da impulso para que se atrevan a ser esquiladoras o, por qué no, estancieras o bien futuras competidoras como existe en Nueva Zelanda. Estamos marcando un hito y eso es muy bonito”, afirmó Cuevas.

El curso culmina el próximo 14 de septiembre, cuando tras la intensa capacitación, las alumnas reciban los certificados que acreditarán los nuevos conocimientos adquiridos en esquila ovina.