Un grupo de 17 vecinos de Río Verde, entre niños, jóvenes y adultos, participaron de una jornada artística desarrollada el pasado sábado 29 de septiembre.

Inspirados en la flora, fauna y los paisajes del futuro Parque Nacional Kawésqar, los asistentes echaron a volar su imaginación y crearon preciosas obras de arte.

Asimismo y mientras se realizó la instancia, los participantes de la comuna rural pudieron aprender sobre teoría del color y técnicas básicas de pintura gracias a una clase magistral dictada por la reconocida artista magallánica, Andrea Araneda.

Para Araneda, la jornada que lideró fue particularmente interesante, pues “teníamos personas de edades muy distintas y podíamos ver cómo la visión de un niño se contrasta con la de un adulto, y eso se ve en los resultados pictóricos, que no son ni mejor ni peor pero tenemos estructuras variadas.”

Las posibilidades del establecimiento del Parque Nacional Kawésqar permitirán la vinculación de las comunidades locales con el patrimonio natural y cultural del territorio.

En ese sentido, la Asociación Kauyeken, a cargo de organizar la actividad junto al municipio y Casa La Porfía, seguirá trabajando para que vecinos y vecinas puedan aprender y sentirse parte de esta nueva área protegida.

Impresiones

Una de las participantes del taller, Celina LlanLlan, miembro de la comunidad kawésqar Ekcewe Lejes Woes, destacó el valor de este tipo de iniciativas, más aún en una zona rural, “pues allí es donde más se aprecia la naturaleza”.

LlanLlan agregó que en el taller “aprendimos bastante, porque pudimos sacar los colores nítidos y vivos de la tierra, y así toda esta naturaleza hermosa que tenemos −sobre todo el Parque− se conserva  y se genera más conciencia. Yo pinto hace años, pero siempre uno va aprendiendo y adquiriendo más conocimientos”.

“A mí mezclar colores me cuesta bastante, la rosa cromática me cuesta, entonces es bueno practicar estos conocimientosentregados por los mismos colores que están en la naturaleza”, añadió.

Otra participante del taller, la joven Valentina Poblete de 11 años, expresó una visión similar: “El taller me pareció muy entretenido, porque aprendí a mezclar los colores, y como a partir de dos colores o de los colores primarios se pueden crean muchos nuevos colores. Yo hice un cuadro de un paisaje con un árbol, montañas y un río que me imaginé que podrían estar en el Parque”.