Una joven de 24 años fue atacada sexualmente en dos oportunidades por el mismo sujeto. La primera el año pasado, y la última este jueves en reprimenda por haberlo denunciado a la justicia.

Los hechos se dieron en septiembre de 2019, cuando un sujeto identificado como Ramón Arturo Guinado Hechenleitner, de 53 años, y voluntario de Bomberos hace 11 años, junto a otro identificado como Christopher Casanova, interceptaron a la joven cuando regresaba de su trabajo por calle Santos Mardones y la hicieron subir a un auto. Una vez allí, Casanova la violó mientras Guinado la sostenía.

Producto del ataque, la joven quedó embarazada. Tras los hechos, la víctima decidió hacerse un aborto y denunciar a sus atacantes.

No obstante, los hechos no terminaron allí. Este jueves, mientras la joven, regresaba a su hogar por calle Pablo de Rokha, fue interceptada por dos sujetos. “¡Te acuerdas de mí!”, le dijo uno de ellos, bajándose la mascarilla e identificándose como el violador. “Lo que te voy a hacer es para que no me vuelvas a denunciar”, habría dicho Guinado, para luego realizarle tocaciones y agredirla sexualmente, según relató la víctima a la Fiscalía.

De acuerdo a la investigación de Fiscalía, la fijación de Guinado por su víctima vendría por un interés romántico en la madre de la joven. “Me gustaría que estos sujetos que me violaron los metan presos por lo que me hicieron”, expresó la fiscal Wendoline Acuña, a cargo del caso, al leer el desgarrador testimonio de la víctima en la audiencia de formalización realizada este viernes.

“El imputado claramente tiene como una especie de obsesión con esta joven, porque insiste en atacarla, en perseguirla, en estar atento a lo que ella hace, tiene conocimiento de cuáles son sus rutinas, por lo que creemos que existe un peligro para ella y hay antecedentes calificados que permiten presumir que puede nuevamente volver a atacarla”, dijo la fiscal Acuña, según consignó el medio La Prensa Austral.