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Encabezando el responso de Gonzalo Muñoz del Campo, el joven que falleció tras ser golpeado por carabineros y un guardia de seguridad, reapareció este sábado el obispo de Magallanes, Bernardo Bastres.

El religioso estuvo en Roma junto a un grupo de obispos chilenos que se reunieron con el Papa Francisco, a quien le presentó su renuncia al cargo tras los escándalos de pederastía que remecen a la Iglesia Católica en Chile.

Bastres aseguró que existe vergüenza al conocer situaciones que los toman por sorpresa, pero aseguró que se mantendrá en sus funciones como obispo de Punta Arenas.

“El haber presentado nuestra renuncia y nuestra disponibilidad al Papa no cambia el hecho de que uno sigue siendo el obispo y lleve adelante la Diócesis hasta que el Papa decida. Por lo tanto es la misma situación”, precisó el pastor, según consigna este domingo el diario La Prensa Austral.